Producción cafetera avanza con enfoque ambiental
Escrito por Diego Andrés Marínez Polanía - 12/17/2025
La estrategia de Filtros Verdes, liderada por la CAM y la Federación Nacional de Cafeteros, está transformando el beneficio del café.

En la finca Las Villas, ubicada en el corregimiento de Bruselas, en Pitalito, María Elizabeth Gómez Molina observa su cafetal con la tranquilidad de saber que el proceso de beneficio del café que allí realiza no contamina la quebrada que atraviesa su predio aguas abajo. Su experiencia es hoy un ejemplo de producción sostenible en el sur del Huila.
María Elizabeth es caficultora “de nacimiento”. Hija de padres cafeteros, llegó hace 20 años desde Nariño a Bruselas y desde hace 12 años se estableció en la vereda Bombonal, donde el café es el sustento de su familia. Su compromiso con el cuidado ambiental se fortaleció cuando fue invitada a participar en el proyecto de Filtros Verdes.
“Un día me llamó la extensionista del Comité de Cafeteros y me habló de un proyecto para descontaminar, de unos filtros verdes. Me explicó de qué se trataba y me invitó a participar”, recuerda. A partir de ese momento llegaron las capacitaciones y el acompañamiento técnico por parte de la Federación Nacional de Cafeteros y la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena (CAM).
Para la caficultora, el proceso implicó adecuar un espacio dentro de la finca, incluso sacrificar algunos árboles de café y matas de plátano. “El esfuerzo vale la pena. Hoy nos quejamos del calor y de que ya no hay agua, pero no hacemos nada por cuidarla. Estos programas ayudan muchísimo a proteger el medio ambiente”, afirma.
Economía circular al servicio del café
La historia de María Elizabeth hace parte del proyecto Filtros Verdes, una estrategia de economía circular que se implementa en el Huila mediante acuerdos voluntarios entre la CAM, la Federación Nacional de Cafeteros y los productores.
Michael Andrés Falla, profesional de producción sostenible de la CAM, explica que gracias a esta iniciativa ya se han construido 99 sistemas de filtros verdes en fincas cafeteras del departamento. “Estos sistemas contribuyen a la reducción de hasta el 100 % de los vertimientos que se generan durante el beneficio del café”, señala.
El proyecto se enmarca en un acuerdo de producción y consumo sostenible con el subsector cafetero, que permitió la ejecución de un convenio cercano a los mil millones de pesos. “Con este ejercicio promovemos buenas prácticas ambientales y evitamos que se sigan contaminando las fuentes hídricas”, agrega Falla.
Tecnología probada en el territorio
La tecnología utilizada corresponde a un modelo desarrollado por Cenicafé, validado a través de pilotajes en el departamento. Para su implementación se seleccionaron fincas de entre una y tres hectáreas, con procesos de beneficio de cuatro lavados y condiciones topográficas adecuadas, ya que el sistema opera por gravedad.

Los filtros verdes se instalaron en municipios estratégicos como Pitalito y Palestina, en el área de influencia del POMCA del río Guarapas; La Plata, en la microcuenca de la quebrada Barbillas; y Garzón, en la zona de la quebrada Garzón.
Cómo funciona el filtro verde
Albeiro Álvarez, analista del Comité de Cafeteros y encargado del área de poscosecha, explica que el sistema recibe el nombre de filtros verdes porque utiliza una planta capaz de asimilar las aguas mieles, luego de un tratamiento preliminar.
“El sistema conduce las aguas mieles a un invernadero impermeabilizado, donde se siembra pasto vetiver, una especie seleccionada por Cenicafé debido a su alta capacidad de consumo de agua, cercana a los 24 litros por metro cuadrado”, explica Álvarez.
En cada invernadero se siembran tres esquejes cada 30 centímetros. La planta asimila, evapora y transpira las aguas mieles, evitando que estas lleguen al suelo o a las fuentes hídricas. Además, el vetiver se convierte en un recurso adicional para el caficultor, pues sirve para estabilizar taludes, prevenir erosión y como forraje para ganado.
“Estamos transformando un residuo contaminante en un valor agregado. Eso es bioeconomía circular”, destaca Álvarez.
Retos y beneficios para los productores
Aunque el proyecto ha presentado desafíos relacionados con la topografía, el tipo de suelo y la disponibilidad de áreas, los resultados han sido positivos. El sistema requiere paciencia, ya que el pasto vetiver necesita hasta seis meses para desarrollar completamente su raíz antes de recibir las aguas mieles.
“Este es un proyecto piloto que está dando muy buenos resultados”, asegura Michael Falla. Además de reducir el impacto ambiental, los caficultores evitan sanciones por vertimientos, mejoran las condiciones de sus fincas y acceden a sellos ambientales.
“Esto también les permite mejorar el precio del café y seguir posicionando al Huila como el primer productor del país en cantidad y calidad”, concluye el profesional de la CAM.

