286 personas han sido secuestradas en 2023 en Colombia

El país se enfrenta una crítica situación con el incremento del secuestro. Las familias afectadas exigen medidas urgentes del gobierno nacional.

En lo que va del año 2023, el país ha experimentado un incremento preocupante en los casos de secuestro, con un total de 286 víctimas, marcando un aumento del 72% en comparación con el mismo período del año anterior. Este dato revelador pone de manifiesto una tendencia inquietante que requiere atención urgente por parte de las autoridades y la sociedad en general.

Por tipos de secuestro, los números muestran un significativo aumento en los secuestros extorsivos, alcanzando la cifra de 190 casos, lo que representa un impactante incremento del 81% en comparación con el año pasado. Además, los secuestros simples también han experimentado un aumento del 57%, totalizando 96 casos en este período.

La situación actual de los secuestrados revela un panorama complejo. Se han llevado a cabo un total de 75 rescates, de los cuales tres fueron perpetrados por el Ejército de Liberación Nacional (ELN), uno por delincuencia común y 71 aún no han sido atribuidos a ningún grupo específico. Sin embargo, la tragedia se hace evidente con la noticia de ocho personas fallecidas en el contexto de estos eventos. Afortunadamente, 152 personas fueron liberadas, 17 lograron escapar y 22 permanecen como cautivos en manos de los secuestradores.

Leer también: DESARTICULAN A «LOS CALETEROS» POR TRÁFICO DE ESTUPEFACIENTES

El análisis mensual destaca la gravedad de la situación, siendo octubre el mes con el mayor número de secuestros, registrando un preocupante total de 38 casos. Por su parte, en enero se reportaron 36 secuestros. Frente a este escenario, el Ministerio de Defensa informa que se han realizado más de 600 capturas por este delito en todo el país, con el 90% de los detenidos bajo medida de aseguramiento.

Ante esta difícil situación, la sociedad demanda respuestas y acciones efectivas por parte de las autoridades para garantizar la seguridad de sus ciudadanos. La lucha contra este flagelo requiere una colaboración coordinada entre las fuerzas de seguridad, el gobierno y la ciudadanía, con el objetivo de revertir esta tendencia preocupante y brindar tranquilidad a la población afectada.