40% de Cartagena sufre por cuatro días sin suministro de agua
Escrito por Tania Xiomara Chala Lopez - 02/19/2024
Un problema en la infraestructura del acueducto ha generado preocupación y malestar entre los residentes, mientras las autoridades trabajan incansablemente para resolver la emergencia y restablecer el servicio lo antes posible
La ciudad de Cartagena enfrenta una crisis sin precedentes tras cuatro días consecutivos sin servicio de agua, afectando a más del 40% de su población. El viernes 16 de febrero, se detectó un daño en la infraestructura del acueducto en el barrio Ceballos, lo que ha desencadenado una serie de complicaciones técnicas y logísticas en las labores de reparación.
La empresa Acuacar, encargada del suministro de agua en la ciudad, informó que el daño se encuentra en una tubería de 36 pulgadas de diámetro que abastece el 40% de Cartagena, lo que ha llevado a la suspensión total del servicio en esa área. A pesar de los esfuerzos continuos de los equipos de reparación, las condiciones del suelo han dificultado las labores, retrasando significativamente el proceso de arreglo.
La complejidad de la situación ha obligado a implementar medidas de contingencia, como la restricción del suministro de agua en áreas no afectadas para asegurar la capacidad de almacenamiento en los tanques y garantizar el abastecimiento en los sectores sin servicio. Sin embargo, estas medidas no han sido suficientes para evitar la escasez generalizada.
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El alcalde de Cartagena, Dumek Turbay, ha declarado la ciudad en estado de emergencia y ha solicitado ayuda tanto al gobernador de Bolívar como al alcalde de Barranquilla para proporcionar carrotanques que puedan abastecer a la población afectada. Turbay ha advertido que la situación podría prolongarse hasta el día martes, dejando a los ciudadanos enfrentando una grave crisis sin acceso al vital líquido.
Mientras tanto, Acuacar ha asegurado que continúa distribuyendo agua a través de carro tanques, priorizando la atención a hospitales, barrios vulnerables y sectores comerciales que dependen del suministro para su funcionamiento. A pesar de los esfuerzos, la incertidumbre persiste y la ciudad enfrenta un desafío sin precedentes en su sistema de abastecimiento de agua.