En Política 2+2 No Son 4

Por: Jorge Fernando Perdomo

Cuando estamos a menos de 6 meses para las elecciones regionales, donde se elegirán alcaldes y gobernadores, todas las campañas diseñan sus estrategias, aceitan sus maquinarias y buscan coaliciones para consolidar las supuestas mayorías que les garantizara el éxito en octubre.

Sin embargo varios de los candidatos pareciera que no aprendieron las lecciones de las últimas elecciones, donde se evidenció un revolcón por parte de los electores al tomar decisiones en torno a su futuro.

Haciendo historia regional, recordamos que en octubre de 1991 el candidato de las mayorías en una alianza de partidos políticos que auguraba un éxito arrollador era José Antonio Gómez enfrentando a Julio Enrique Ortiz, con una coalición bastante menor. Los dos, con grandes condiciones, oradores excelsos, trabajadores incansables, sin embargo en una clara demostración del axioma que en política 2 más 2 no son 4 y que no hay nada definido hasta cuando se cierran las urnas, Julio Enrique Ortiz se erigió como el primer gobernador por voto popular.

Igual sucedió en 1997 cuando Jaime Bravo, con una campaña silenciosa y austera, en rebeldía enfrentó la institucionalidad de su partido representada en Hernando Ruiz quien coaligado con otros movimientos políticos, en el papel sumaba las mayorías.

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Lo mismo en 2001 con Juan Cárdenas, un desconocido que enfrentaba a dos candidatos de peso, con mucho recorrido y reconocimiento quienes para los politólogos y las encuestas eran los mas opcionados, el ex senador y ex gobernador Jaime Lozada y el ex ministro, ex senador, ex alcalde Guillermo Plazas. Dos grandes políticos retirados con una derrota.

Trascendiendo al plano nacional, en la última elección presidencial Federico Gutiérrez representaba una gran convergencia de partidos, sumaba un gran número de parlamentarios, los cacaos del empresariado y todos apostaban a que pasaría a segunda vuelta para enfrentar a Gustavo Petro. Pero la gente quería un cambio y quienes repudiaban la opción del candidato del pacto histórico se volcaron a respaldar a Rodolfo Hernández. Decían “preferir un tiro en el pie y no uno en la sien”. Tarde nos dimos cuenta que al ingeniero no le interesaba ganar pues simplemente era un «caballo de troya» en la otra Colombia que votaba el 29 de mayo de 2022.

La misma elección de Petro es una muestra evidente que la política ha cambiado. Que el éxito no se garantiza sumando estructuras y cacicazgos o publicitando encuestas amañadas. Quien sepa sintonizarse con el electorado, mover fibras, generar esperanzas, representar un cambio, convencer que no es más de lo mismo, estará recibiendo la credencial de gobernante regional para los próximos 4 años.