Neiva continuará con un POT desactualizado
Escrito por Daniela Perdomo Reyes - 11/09/2023
Suspenden evaluación del POT de la capital huilense, por múltiples inconsistencias ambientales.
A partir del primero de enero, la capital huilense se verá sin un Plan de Ordenamiento Territorial (POT) vigente, el cual representa la hoja de ruta para su desarrollo futuro. El nuevo POT proyectado para los próximos 12 años (2023-2035) ha sido nuevamente congelado debido a numerosas inconsistencias detectadas en la revisión del componente ambiental.
El proyecto de actualización no logró cumplir con los parámetros técnicos requeridos y presentó múltiples fallos en los aspectos sociales, económicos y ambientales, lo que impidió su validación. Ante esta situación, la Corporación Autónoma del Alto Magdalena (CAM) suspendió el proceso de evaluación, culminando en un concepto desfavorable.
De esta forma, el proyecto de actualización queda en un estado de incertidumbre. Simultáneamente, la autoridad ambiental declaró la suspensión de términos a partir de la fecha de expedición, poniendo en espera la aprobación de este documento, crucial para el desarrollo urbanístico.
La subdirectora de Planeación y Ordenamiento Territorial, Deicy Martina Cabrera, comunicó la decisión en el auto de cierre del trámite, emitido el 2 de noviembre de 2023.
«Hemos concluido el procedimiento de evaluación y concertación en el componente ambiental con un concepto desfavorable, considerando que se deben realizar ajustes, aunque el Municipio tiene la posibilidad de presentar una nueva propuesta», confirmó la funcionaria.
Bajo estas circunstancias, el POT aprobado hace 14 años mediante el Acuerdo 026 de 2009 continuará en vigencia hasta el 31 de diciembre de 2023.
«Es lamentable porque Neiva se queda sin Plan de Ordenamiento Territorial. Sin este instrumento técnico, su desarrollo quedará pendiente. Han pasado tres administraciones y no fue posible expedir el nuevo POT, lo que tendrá graves efectos para el desarrollo de la ciudad» dijo el vocero de la Veeduría, José Sneider Verjan, en una publicación en el Periódico La Nación.
Esta década perdida se remonta al 2014, cuando el Departamento Nacional de Planeación instó a la incorporación de la gestión del riesgo en los Planes de Ordenamiento Territorial (POT), una recomendación que nunca se materializó.
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Los exalcaldes Pedro Hernán Suárez (2012-2015) y Rodrigo Lara Sánchez (2016-2019) no lograron avanzar en la actualización del ordenamiento territorial. Durante la administración de Gorky Muñoz Calderón, se prometió completar la actualización antes de finalizar su gobierno, pero tampoco se logró. Por tercera vez, la autoridad ambiental frenó la iniciativa debido a graves inconsistencias técnicas y ambientales.
Al considerarse técnicamente no favorable, la administración deberá realizar ajustes y presentar nuevamente la documentación para continuar el proceso.
Sin embargo, la complejidad de estos ajustes implica una reformulación completa de los documentos y plantea un desafío en términos de plazos. A pesar del optimismo del jefe de Planeación, José Eustacio Rivera, el tiempo se agota y la expedición del nuevo POT antes del 1 de enero parece improbable.
El alcalde entrante, German Casagua, probablemente se encargará de la documentación y trámites, y la aprobación quedará en manos de los nuevos concejales. Casagua expresó su interés en reformular el POT para abordar aspectos clave como el desarrollo económico y los usos de suelo.
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