Huila, refugio vital para el oso de anteojos
Escrito por Tania Xiomara Chala Lopez - 02/22/2024
En el corazón del Huila, la naturaleza despliega su grandeza con la presencia del emblemático oso de anteojos
Entre los verdes valles y las imponentes montañas del Huila, el oso de anteojos, un símbolo de los Andes, ha hallado un hogar seguro. En el marco del Día Internacional para la Protección de los Osos, la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena (CAM) celebró el papel crucial de esta especie en la rica biodiversidad de la región, donde su presencia se ha detectado en 14 de los 37 municipios huilenses.
Desde el primer avistamiento de un proceso de apareamiento en su hábitat natural hasta el tierno espectáculo de osas amamantando a sus crías, el Huila se erige como un santuario para el oso de anteojos. Los registros de cinco camadas, con una tasa de supervivencia del 100%, subrayan el éxito de esta especie en el territorio. Katherine Arenas, bióloga de la CAM, resalta la importancia de estos hallazgos: “Esto nos demuestra que en el Huila contamos con hábitats propicios para el crecimiento de poblaciones de uno de los mamíferos más grandes que hay en Los Andes y una de las especies más amenazadas que existen actualmente. Esta labor de conservación se está realizando de manera articulada entre la comunidad e instituciones”.
La protección del oso de anteojos se ha convertido en un punto de unión para los habitantes del Huila, con la formación de 23 grupos de monitoreo comunitario y la participación activa de 374 personas comprometidas con la preservación de esta especie. Desde el sur hasta el norte del departamento, la educación ambiental ha sido fundamental para concienciar sobre la importancia de conservar al oso andino y su hábitat.
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Para conmemorar esta fecha, la CAM organizó diversas actividades educativas en instituciones educativas y comunidades, resaltando la relevancia ecológica del oso de anteojos y la necesidad de proteger ecosistemas vitales como los parques naturales regionales El Dorado y Serranía de Minas.
El compromiso y el esfuerzo de los grupos de monitoreo comunitario en las áreas protegidas del departamento han permitido obtener un mayor conocimiento sobre las poblaciones de osos andinos en la región, demostrando que la coexistencia armoniosa entre humanos y vida silvestre es posible cuando se trabaja en pro de la conservación del medio ambiente.
